🚢La historia de la Rueda de Falkirk y su papel en la revitalización de los canales escoceses es una narrativa de innovación, ingeniería y renacimiento cultural. Este ascensor rotatorio, único en su tipo, conecta los históricos canales Forth y Clyde con el canal Union, que durante décadas estuvieron separados por una diferencia de altura de 35 metros.
🏴Inaugurada en 2002 como parte del proyecto Millennium Link, la rueda no solo ha restablecido una conexión física perdida, sino que también se ha convertido en un símbolo de la capacidad humana para combinar funcionalidad con estética, integrándose armoniosamente en el paisaje escocés con un diseño inspirado en una hélice de barco y el antiguo símbolo celta del hacha doble. Aunque la realidad es que visto desde lejos parece una suerte de abrelatas gigante que funciona como un ascensor para barcos.
🚂La conexión entre estos canales era antaño posible gracias a una serie de once esclusas que requerían casi un día entero para ser atravesadas. La llegada del ferrocarril relegó a los canales al olvido, y en su cierre, quedaron como vestigios de una era industrial. Décadas después, la construcción de la Rueda de Falkirk como parte del proyecto Millennium Link, valorado en 85,4 millones de libras, simbolizó un renacer tanto económico como cultural.