Apolos aparece por primera vez en la Biblia en el relato de Hechos 18:24-25, y es mencionado como predicador cristiano, proveniente de Éfeso (probablemente en el año 52-3). Se describe como un hombre “varón elocuente, poderoso en las Escrituras”, quien enseñaba con exactitud las cosas relacionadas con Jesús, aunque sólo tenía el bautismo de Juan. Fue a él a quien Priscila y Aquila le explicaron mejor el evangelio y si constituyó en poderoso predicador de la Palabra.