El libro de los Hechos nos presenta los comienzos de la Iglesia. Este capítulo nos mueve a otro paso importante en el progreso del evangelio a través del mundo. Hasta este punto el evangelio había sido llevado a nuevos lugares por aquellos que habían sido esparcidos. Pero no había nadie que se hubiese entregado específicamente al trabajo de ir a otros lugares a empezar y organizar nuevas Iglesias.