La Maravillosa Interpretación en la Serie Mundial del 68.
En 1968 en el juego 5 de la Serie Mundial, un joven, con una versión suave, pausada, fresca y punzante, nada de lo convencional con un toque de blues y soul folk, así se cambió la forma de interpretar el himno de los Estados Unidos para siempre gracias a José Feliciano