María Magdalena Alfaro, cariñosamente: Magda, es una de tantos sobrevivientes de la guerra en El Salvador que logró trabajar muy de cerca del Beato Padre Rutilo Grande y que al igual que a Él sufrió persecución y el riesgo de secuestro en varias oportunidades. Milagrosamente está viva para conocer por medio de Ella la cruda realidad de nuestros Mártires Salvadoreños.