-La expansión de servicios como “Listo para Comer” responde a una necesidad real del consumidor moderno, pero la idea de eliminar por completo las cocinas plantea interrogantes éticos, nutricionales y culturales. Más allá de una predicción empresarial provocadora, el futuro de la cocina dependerá del equilibrio entre comodidad, salud, tradición y tecnología. La sociedad deberá decidir si está dispuesta a sacrificar el arte de cocinar por la conveniencia de lo inmediato, o si encontrará nuevas formas de integrar ambas dimensiones en su día a día.