Los códigos sagrados lumínicos, también conocidos como códigos de luz, encierran información esencial, encriptada y almacenada, en los distintos niveles de nuestro ADN y se puede acceder a ellos desde el corazón. Son estructuras geométricas de luz que simbolizan los procesos del alma y al activarlos se eleva la frecuencia vibratoria de nuestros cuerpos.