Personalmente no quiero creer que el poder del narcotráfico en RD ha llegado a los medios de comunicación de manera que la presión mediática en el caso de los 9.8 toneladas de cocaína ha caído sobre quien tiene el mérito que en este caso son la DNCD y el Ministerio Público.
Hay demasiada gente haciéndose la tonta con P, porque yo no puedo decir haciéndose el pendejo, que está reclamando detalles de una investigación que por sentido común debe tener elementos que no trascienden públicamente.
Ya sabemos que no fue una actuación de la DNCD en solitario, ya sabemos que hubo y sigue habiendo cooperación internacional por lo menos de cuatro países incluyendo el destino final que era Bélgica. Sabemos que la DEA está metida hasta la coronilla, pero en el afán de demeritar a la DNCD hay gente que le suelta la soga al trompo.
Sabemos que el MP investiga a 15 personas, sabemos que un contenedor salió de Guatemala y el otro ya estaba en el puerto de Caucedo y todo el mundo sabe que es el único país que tiene la posibilidad de producir tal cantidad de droga es Colombia.
Quiénes siguen preguntando pendejadas seguro que no vieron la nota que se publicó la semana pasada. Una nota escueta y una foto sonriente que decía lo siguiente: El presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, vicealmirante José M. Cabrera Ulloa, sostuvo un encuentro con la contralmirante Jo-Ann F. Burdian, directora de la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial Sur (JIATF-S), de Estados Unidos, con quien trató temas relacionados a la continuación del reforzamiento de las operaciones conjuntas contra el narcotráfico y la criminalidad organizada transnacional.
El encuentro entre el titular de la DNCD y la Contralmirante Burdian, Directora de la JIATF-S, reafirma el compromiso de la República Dominicana con la cooperación internacional y la coordinación conjunta en la lucha, persecución y combate al tráfico ilícito de drogas y sus delitos conexos.
Si alguien quiere ver eso como un mensaje después del alijo de 10 toneladas los puede ver, si quiere cerrar los ojos está en su derecho.
Si de algo yo estoy segura es que ni la DNCD ni el MP tiene la posibilidad de dar seguimiento desde su origen hasta su destino a ningún cargamento de cocaína o cualquiera otra sustancia prohibida por la ley.
Quienes lo creen o quieren hacer creer que lo creen están tan apurados por desmeritar a los investigadores que caen en la estupidez.
Después de esas diez toneladas de cocaína vienen cosas grandes muy grandes, yo no sé cómo, dónde o cuándo pero sé que llegarán.
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