Hoy no hay noticias, pura paja en los medios de comunicación, si la DNCD no hubiera atrapado un contenedor con 3 toneladas de cocaína no habría un hecho concreto en los medios de comunicación.
La paja mediática la comparten anuncios del gobierno de terminar una parte de la cárcel de las parras o de mejorar el paso rápido en los peajes que ha crecido un 60%, la demanda de los jueces por un aumento salarial o las discusiones de los editores de diarios con la suprema corte de justicia que insiste en ocultar los nombres de los grandes ladrones, porque de los pequeños no se preocupa.
Los empresarios quieren reducir la cesantía y los sindicalistas que dicen representar, pero que no representan a nadie, se oponen.
Alguien descubrió un nuevo método de atraco en la autopista Duarte usando vehículos de lujo para simular una asistencia desinteresada y los comerciantes dijeron de nuevo que el bono navideño dinamiza la economía.
En medio de eso el director del INTRANT Nelson Morrison le sugiere a la ciudadanía que para llegar a tiempo en medio del caos salgamos una hora antes de cualquier actividad.
Yo no sé cuánto vale o cuanto cuesta una hora de miles de vehículos encendidos en medio del caos de la capital pero alguien debe detenerse para hacer el cálculo. Y ese cálculo lo tiene que hacer el gobierno en un país que no produce combustibles fósiles y que invierte miles de millones en la importación de derivados del petróleo. Importar combustibles es el mejor negocio de RD, es tan bueno que varios ricos se han peleado por eso.
Este y todos los gobiernos anteriores han intentado resolver el problema del tránsito urbano ampliando calles y construyendo enormes obras de infraestructura. Ninguno, absolutamente ninguno ha escuchado a los urbanistas y planificadores que han insistido en que no es así.
No hay manera de que alguien intente cosas pequeñas como poner orden.
El caso del 9 es patético, han ampliado la vía, millones de pesos de nuestros bolsillos en un proyecto que no puede funcionar porque no se puede tocar los intereses de Antonio Marte.
En el 9 se movieron a los vendedores y se derrumbaron edificaciones pero la parada de Antonio Marte es intocable y los autobuses que se estacionan en paralelo también.
No hay manera de que un policía de la digesset se entere de un autobús ocupando un carril esperando un pasajero es un carril menos para el servicio.
Hay decenas de puntos críticos en la ciudad que se resuelven con un giro, te lo dicen ingenieros y lo plantea el sentido común que se lo quitan a los funcionarios desde que los designan.