Estas predicación te ayudará a fortalecer tu fe, a estar preparado para los desafíos espirituales y a vivir una vida guiada por las revelaciones divinas.
1. **Cumplimiento de Profecías**:
- Observa cómo las profecías pueden cumplirse en la vida cotidiana, como el ejemplo de los nietos liderando la alabanza.
- Reconoce la importancia de prepararse y estar atentos a las revelaciones divinas.
2. **Dones Espirituales**:
- Valora y busca los dones espirituales, como la sanación, el discernimiento y la profecía, ya que son esenciales para enfrentar desafíos espirituales.
- Comprende que estos dones ayudan a tomar decisiones correctas y a fortalecer la fe.
3. **El Amor y la Profecía**:
- Sigue el amor y procura los dones espirituales, especialmente la profecía, para vivir de manera acertada y bendecir a los demás.
4. **Obediencia a las Profecías**:
- Aprende de los testimonios de personas que han obedecido profecías y han visto bendiciones, así como de aquellos que las ignoraron y enfrentaron consecuencias negativas.
5. **Rol de la Profecía en la Comunidad**:
- Entiende que la profecía es una señal de la presencia y conocimiento de Dios, y es fundamental para edificar y guiar a la congregación.
- Reconoce que todos los creyentes tienen el derecho y el deber de profetizar para exhortar y edificar a los demás.
6. **Desafíos y Compromiso**:
- Mantén el compromiso con la oración y el evangelismo, incluso ante la creciente maldad y el enfriamiento del amor en la sociedad.
7. **Preparación y Vigilancia**:
- Sé consciente de las profecías bíblicas y prepárate espiritualmente para los tiempos difíciles, confiando en la infalibilidad de la palabra profética.
8. **Importancia del Estudio Bíblico**:
- Estudia el Apocalipsis y otras escrituras para entender mejor las profecías sobre el fin de los tiempos y buscar revelaciones personales y colectivas.
9. **Apoyo y Oración por Israel**:
- Apoya a Israel y ora por su bienestar, reconociendo la relevancia profética de su situación.
10. **Esperanza en el Avivamiento**:
- Mantén la esperanza en un gran avivamiento espiritual y en la victoria final de la iglesia, incluso en medio de tribulaciones.