Ejercer el periodismo en Venezuela tuvo un cambio después de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. De un contexto represivo sostenido y de larga data, se concretó un avance en prácticas más violentas, como la masificación de las amenazas y el incremento de detenciones arbitrarias con encarcelaciones de mayor tiempo que siguen afectando hoy a periodistas en el país.