Llegamos al final de temporada y sucedió de la mejor manera.
Todo lo que ha pasado en este tiempo ha sido una catarsis personal que me ha empujado a crecer y renovarme.
Estoy convencida de que no se termina de aprender y eso es maravilloso.
Dedico este episodio a cada persona que está en mi vida y que forma parte de mis recuerdos, de mis ideas, de mis atrevimientos para seguir creciendo.
Dedico este episodio a mi Mamá que desconoce totalmente que es un podcast y que nunca ha visto un video de lo que hago ahora pero siempre me dice que me admira, me quiere y que le gusta escucharme feliz.
Pido que su salud sea perfecta.
Y agradezco a Cuarto Azul Studio por sumarse y creer en este proyecto que continúa dentro de un mes más y gracias a Fondo de Botella por sumarse como patrocinador.