En la voz de La Lupe entraban el canto, el grito, el gemido, la risa, el susurro y todos los demás verbos de la vocalización. Sus dotes eran temibles. Rugía con una pasión y fuerza como la de Janis Joplin, pero antes y en español; que no se hayan cruzado es una verdadera lástima. Fue realeza en términos de boleros y soul latinos, además de jugar un papel fundamental en la historia latina en Estados Unidos. Durante los 60s, cuando costaba que se encuentren la calidad y la popularidad para la música afrocaribeña en el mercado de USA, La Yiyiyí ocupó un lugar de máximo privilegio.
Responsable de himnos como ‘Puro Teatro’, ‘Oriente’, ‘No Matarás’, ‘Que Te Pedí’ (versionada por Kali Uchis) y tantísimos más. Entre su inmensa discografía brillan especialmente “Con el Diablo en el Cuerpo” (1961), “Mongo Introduces La Lupe” (1963), “Tito Puente Swings, The Exciting Lupe Sings” (1965) y “Homenaje a Rafael Hernández” (1966).
Autor: Agustín Wicki (@agustinwicki).