“[El amor] no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad” (1 Corintios 13:6).
“El amor ama al pecador, pero odia al pecado, y le advertirá fielmente de su peligro, señalándole al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. El pecado no debe ser encubierto, sino quitado.”—Manuscript Releases, tomo 1, pág. 217.