¿Cuántas veces has pensado en decir algo y al final no has dicho nada? ¿Cuántas veces has salido de casa diciendo unas palabras cualesquiera? ¿Y si te dijera que ESAS podrían ser tus ÚLTIMAS PALABRAS? No solemos pensarlo, pero el tiempo es una ilusión y por ello hoy te cuento POR QUÉ deberías DECIR ESO QUE NO DICES (ya me lo agradecerás).