La oración no es solo una oportunidad para pedir, sino una forma de fortalecer nuestra relación con Dios, encontrar paz en medio de los desafíos y recibir dirección en nuestra jornada diaria. Cuando oramos continuamente y con fe, nuestra conexión con el Señor se vuelve más fuerte y nos ayuda a afrontar la vida con esperanza y confianza.Te invitamos a ver y a compartir este mensaje que será de mucha bendición.