Cuando los paseos empiezan a hacerse más frecuentes y más largos, de pronto todo se vuelve más fácil de dialogar y compartir. Pero no siempre habrán días buenos, y en la adolescencia es algo más común de lo que uno llega a recordar. Quizás ello fue lo que orillo a Landon a comportarse de esa manera… ¿O quizás fue otro el motivo?