El otoño es sin duda la estación del color y de las atmósferas, y el de este año está siendo muy especial, como hacía años no se producía. Y todo, porque está haciendo un clima perfecto, el que tiene que hacer y cuando lo tiene que hacer.
Los hayedos están llenos de colores en los árboles y de setas y musgos en el suelo, con lo que me tengo que poner límites de tiempo para estar en estos bosques. Me quedaría en ellos hasta que llegue el invierno.