Por Victor Rodriguez Escalona
LA CÀRCEL QUE DIÒ ORIGEN A LA MÀS GRANDE OBRA DE LA LITERATURA.
En 1597 un hombre ya entrado en años, entrò a la càrcel y no era su primer cautivero. Habìa combatido en la guerra y asi le pagaban por sus servicios a favor de la patria.
Pidiò papel y pluma y lo pagò a los carceleros y escribiò una carta al rey para que tuviese piedad de su situaciòn, pues habìa sido acusado de quedarse con los impuestos y todo habìa sido un error de sus ayudantes.
Pasaron los meses y el rey nùnca se acordò de èl, por lo que pidiò màs papel, pues su vida era la de escribir en la soledad de una celda o de lo contrario se volverìa loco.
Los carceleros se burlaron de èl, preguntandole si serìa otra carta al rey; pero este tomò con un muñòn el papel que le traìan y al verlo, estos le preguntaron si era a causa de la guerra, a lo que èl asintiò con tristeza.
Hacìa dìas que en su mente bullìa lo que deseaba escribir, por lo que se sentò y empezò a escribir:
"En un lugar de la Mancha , de cuyo nombre no quiero acordarme,no ha mucho tiempo que vivìa un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocin flaco y galgo corredor..."
Actualmente, en esa misma càrcel de Sevilla, España hay una placa que reza:
"En el recinto de esta casa, antes càrcel real, estuvo preso (1597-1602) Miguel de Cervantes Saavedra, y aqui se engendrò para asombro y delicia del mundo El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. La Real Academia Sevillana de las Buenas Letras acordò perpetuar este glorioso recuerdo.