
About
Vivimos en un tiempo donde la presión para conformarnos con este mundo es más fuerte que nunca. La cultura nos dice: “cállate, adáptate, no seas radical.” Las voces del sistema empujan a los creyentes a comprometer la verdad, a negociar convicciones, a suavizar lo que Dios ha dicho claramente. Y cuando decimos que no, el horno se enciende.