En Defensa de la Fe

Jesús calma una tormenta 

Luc 8:22  Aconteció un día, que entró en una barca con sus discípulos, y les dijo: Pasemos al otro lado del lago. Y partieron. 

Luc 8:23  Pero mientras navegaban, él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago; y se anegaban y peligraban. 

Luc 8:24  Y vinieron a él y le despertaron, diciendo: ¡Maestro, Maestro, que perecemos! Despertando él, reprendió al viento y a las olas; y cesaron, y se hizo bonanza. 

Luc 8:25  Y les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Y atemorizados, se maravillaban, y se decían unos a otros: ¿Quién es éste, que aun a los vientos y a las aguas manda, y le obedecen? 

Todas las promesas no hacen sino animar al alma a recurrir a la cruz, independientemente de cuál sea su estado o situación. Un fragmento de "Enfriamiento espiritual", de Octavio Winslow (Editorial Peregrino, 2013).

13 Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se ha vuelto insípida, ¿con qué se hará salada otra vez? Ya para nada sirve, sino para ser echada fuera y pisoteada por los hombres.

14 Vosotros sois la luz del mundo. Una ciudad situada sobre un monte no se puede ocultar; 15 ni se enciende una lámpara y se pone debajo de un almud[a], sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en la casa. 16 Así brille vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas acciones y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

En este podcast de resistir hasta el final, conocerás 3 características de personas que no se rinden. Personas que saben como vencer la tentación y cómo resistir al diablo hasta vencerlo.

Falsos Profetas y Falsos Maestros

(7 Características)

2 Pedro 2:1-3

Pero hubo también falsos profetas en el pueblo, como habrá entre vosotros falsos doctores, que introducirán encubiertamente herejías de perdición y muchos seguirán sus disoluciones, por los cuales el camino de la verdad será blasfemado; Y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme.