La situación actual ha alcanzado un grado tan delirante que es insuperable. Ahora resulta que los delincuentes, en este caso los condenados de ERC, envían al Gobierno el texto que más les gusta para su amnistía. Hay que reconocer que el sanchismo tiene una capacidad camaleónica que no tiene límite. No es que dijera antes de la campaña una cosa y ahora haga justo la contraria, sino que los amos le dicen lo que tiene que hacer si quiere seguir en La Moncloa. Por supuesto, si esto lo hiciera el PP no tendríamos un incendio político en los medios de comunicación sino un tsunami.