La elección Robert Francis Prevost es muy interesante y un extraordinario acierto de los cardenales electores. Ha causado una cierta sorpresa, porque no aparecía como un claro favorito. Es cierto que había sonado, pero no con la fuerza de otros. Ha sido un cardenal muy próximo a Francisco y es el primer estadounidense de la Historia. Por tanto, cabe suponer que existirá un cierto continuismo, pero también tendremos que esperar para conocer la línea que seguirá.