No hay ninguna razón que pueda justificar que Feijóo apoye cualquier iniciativa de Sánchez. Y digo expresamente ninguna. El acoso de la izquierda política y mediática ha alcanzado unos límites que hacen imposible cualquier acuerdo o colaboración. Es lamentable que se haya llegado a esta situación, pero el sanchismo ha preferido la confrontación y el frentismo. No hay más que escuchar la comparecencia de la portavoz y sus compañeras de gabinete este martes. Es delirante pedir que el PP apoye la reducción de jornada tras criticarlo con enorme dureza y arrogándose Yolanda Díaz una representación de los trabajadores que no se corresponde con sus fracasos electorales.