EL CANTO DEL GALLO
Lunes, 2/6/2025
Serie: GÉNESIS. Y DIJO DIOS
EP#31 EL FÉRETRO DE LA FE
Hebreos 11:22 “Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos”
Es mucho más que el último sueño del soñador; que sea sepultado en el lugar donde nació; que trae a la memoria esos recuerdos que todos tenemos de su hermosa y tierna mamá y el especial cariño de su papá; ambos sepultados en esa tierra.
La vida de José; una vida de fe, una vida de fidelidad, una vida de noventa y tres años en Egipto, desde los diecisiete años hasta los ciento diez cuando murió. Llegó a ser tatarabuelo. Y vio José los hijos de Efraín hasta la tercera generación. (50.23)
Entonces llama poderosamente la atención que lo registrado en Hebreos 11 como punto alto de su fe. a pesar de todos sus logros tan destacados en Egipto, son las instrucciones que él mismo da en cuanto a sus huesos. A la vez demuestra que su deseo no fue algo superficial. Como “sería lindo”, o “me gustaría”. De lo contario; hizo jurar a los hijos de Israel que lo hicieran.
Hablaba el idioma egipcio, Faraón le dio por mujer a una egipcia, sirvió a un rey egipcio, pero, en su corazón mantuvo fidelidad a su pueblo y su hogar.
Leamos dos versículos más.
Gn.50:24-25 José no arregló un viaje especial para su sepultura como se hizo en el caso de su padre Jacob. Lo que sí hace, es hacer inca pie, sobre el momento en que llevaran sus huesos a la tierra de Canaán. Ese momento no sería inmediato, ni siquiera en el futuro cercano. La frase clave repetida dos veces en cuanto al momento es; “Dios ciertamente os visitará y os hará subir de esta tierra que juró a Abraham, a Isaac y a Jacob”. La fe de José expresado en su deseo final es la de la fe inamovible en las promesas y pactos de Dios.
José anticipa el día que pone fin a los cuatrocientos años de esclavitud y la fuerte opresión que comenzó cuando “se levantó sobre Egipto un rey que no conocía a José” (Ex 1:8)
Las frases “Dios ciertamente os visitará” y la de Hebreos 11 “al morir mencionó la salida de los hijos de Israel”.
Es una referencia profética al día o noche de la redención en que Dios les visitó y los liberó por la sangre del cordero.
Se hacen preparativos extraordinarios. Le embalsamaron a José los médicos egipcios. Un proceso que llevó cuarenta días (50:3). La última frase del último versículo de Génesis, “Y fue puesto en un ataúd en Egipto”. Eso no fue al estilo hebreo.
Juan 19:29-30 describe el estilo hebreo. Termina diciendo “tomaron pues el cuerpo de Jesús, y lo envolvieron en lienzos con especias aromáticas, según es costumbre de sepultar entre los judíos. No había los cuarenta días del proceso de embalsamar y no había ataúd.
Al salir de Egipto no se olvidaron de llevar “Los huesos de José”. Vale decir, que, al cruzar el Mar Rojo, el desierto, y luego el Río Jordán allí estaba el féretro que llevaba los huesos de José.
Seguramente, algunos jóvenes y niños habrán preguntado. ¿Por qué no sepultan el ataúd en algún lado? ¿Qué sentido tiene seguir llevándolo? Les habrán contestado, “este es el féretro de la fe”. Fue todo un mensaje de fe y esperanza en las promesas de Dios.
¿Qué mensaje transmitimos a las generaciones que nos conocen? y ¿Qué mensaje de fe dejamos para las generaciones que no llegaron a conocernos?
Casi todos nosotros recordamos hombres y mujeres cuya fe nos inspiraba, y nos encanta recordarlos, aunque hace largos años que están ausentes del cuerpo y presentes con el Señor.
Que nuestra fe y ejemplo, igual a José, inspira a otros para la gloria de Dios. Amén
FRASE DEL DIA: Que nuestra fe y ejemplo, igual a José, inspira a otros para la gloria de Dios. Amén
Jaime Burnett
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