En el programa, hoy vamos a hablar con Antonio Moya, presidente de ANVA (Asociación Nacional de Vidas Anuladas), una de las asociaciones presentes en la reunión del pasado 21 de junio con los prelados de la Conferencia episcopal (CEE) con el objetivo de hablar del plan de reparación a las víctimas de pederastia clerical y que motivó que enviase un contundente Burofax a Luis Argüello con copia a los obispos y a diferentes medios de comunicación. Dicha reunión duró algo menos de 2h y no contó con la asistencia de las asociaciones mayoritarias de víctimas . De hecho, de las 22 invitadas: 9 de ellas excusaron su asistencia y otras 4 expresaron abiertamente que se negaban a ir. Esta reunión fallida fue previa a la celebración, la semana siguiente, de una Comisión Permanente que , a su vez, al no lograr consenso, se emplazó a una asamblea plenaria extraordinaria para el 9 de julio, dejando claro que el plan a aprobar no sería para todas las víctimas, solo para los casos prescritos o con victimario fallecido. Este plan de los obispos españoles se aprobará sin permitir participar a las víctimas; si bien, tendrá un nombre rimbombante : 'PRIVA' (Plan de Reparación Integral a las Víctimas de Abusos sexuales a menores y personas vulnerables equiparadas en derecho).