Conversó con Maléfica cuando tenía 4 añitos, se obsesionó con Freddy y gracias a la pasión inculcada por su familia en cuanto al cine y la literatura, es que arrancó a escribir.
Dice que poner en palabras sus grandes miedos, la ayudan a dejarlos ir.
Autora de Á(R)mame, Réplicas y Claroscuro. Publicadas bajo el sello Editorial El Ateneo.