69 | Beato Mario Borzaga - 25 abril - Cuarta Temporada (2024)

69 | Beato Mario Borzaga - 25 abril - Cuarta Temporada (2024)

Hermanas Trovadoras de la Eucaristía
00:12:20
Link

About this episode



Desde Pamplona, Colombia con mucho cariño les enviamos nuestro saludo fraterno, las Hermanas Trovadoras de la Eucaristía.


 


Nos llena de alegría saber que muchos de ustedes encuentran en estos pequeños encuentros con la vida de los santos, una motivación para amar más su fe católica.


 


Les pedimos su oración, para que con la gracia de Dios sigamos compartiendo el Evangelio con mucha alegría y creatividad.


 


Hoy, es un día muy importante para la Iglesia, porque recordamos a San Marcos Evangelista, quien con su escritura del Evangelio ha nutrido de manera importantísima a nuestra fe, junto a los demás evangelista.


 


Ya en la segunda temporada conocimos la vida de San Marcos; por ello en esta temporada vamos a explorar la vida de otro gran evangelizador.


 


Pero antes de conocerlo, escuchemos los nombres de los demás santos que en este día, 25 de abril, se recuerdan en nuestro Catálogo Divino:


 


Ellos son: además de San Marcos, evangelista: San Aniano, obispo; santos Pasícrates y Valencio, mártires; San Febadio, obispo; San Esteban, obispo y mártir;


 


San Clarencio, obispo; santo Erminio, abad y obispo; Santa   Franca, abadesa; Beato Bonifacio Valperga, obispo; Beatos Roberto Anderton y Guillermo Marsden, presbíteros y mártires;


 


San Pedro de San José Betancur, religioso; Beato Juan Piamarta, presbítero y el Beato Mario Borzaga, presbítero religioso y mártir


 


Un joven sacerdote misionero que evangelizó la nación asiática de Laos es nuestro protagonista.


 


Se trata del Beato Mario Borzaga.


El padre Mario escribió esta plegaria en días cercanos al ofrecimiento de su vida.


 Meditemos en estas preciosas palabras:


 


¿Cuánto sufrimiento aún queda, oh Señor? Sólo Tú lo sabes y para mí "fiat voluntas tua" en cualquier momento de mi vida. Si quiero ser como la Eucaristía, un buen Pan para ser comido por los hermanos, su alimento divino, debo necesariamente pasar primero por la muerte de cruz.


 


Primero el sacrificio, luego la alegría de repartirme a los hermanos, por todo el mundo; si me reparto sin sublimarme primero en el Sacrificio, me entrego a mis hermanos hambrientos de Dios, un harapo de hombre, un residuo del infierno;


 


si acepto mi muerte en unión con la de Jesús, es precisamente a Jesús que puedo dar con mis propias manos a mis hermanos, por lo que no es una renuncia a mí mismo lo que debo hacer, sino el fortalecimiento de todo lo que hay en mí que puede sufrir, ser sacrificado, sacrificado en favor de las almas que Jesús me ha dado para amar"


 


La acción misionera se desarrolla en medio de grandes desafíos, pero contando con valerosos misioneros y misioneras que desde la predicación y la caridad, anuncian a Jesucristo Resucitado.


 


Nosotros estamos llamados a apoyar todas estas acciones misioneras, con nuestra oración, ayunos y sacrificios y nuestro aporte económico.


 


Muchos de nosotros lo hemos aprendido hermosamente a través de la Infancia Misionera, pero aunque seamos adultos, estamos llamados a seguir teniendo ese corazón de niños, que con sus pequeñas ofrendas, apoyan el anuncio del Evangelio, que se hace incluso en medio de condiciones muy difíciles.


 


Recordemos también que cada discípulo es misionero y el Evangelio debe estar en nuestra mente, en nuestra boca, nuestro corazón y en nuestras manos a cada momento de nuestra vida.


 


Beato Mario Borzaga,


 


Ruega por nosotros.








---

Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/hermanas-trovadoras/message