180| Beata Alfonsa María Eppinger – 9 de septiembre - Catálogo Divino - Quinta temporada (2025)
09 September 2025

180| Beata Alfonsa María Eppinger – 9 de septiembre - Catálogo Divino - Quinta temporada (2025)

Catálogo divino - la vida de los santos 🙏🏼

About

Bendecidos por un nuevo día, nos reunimos nuevamente para compartir más sobre nuestra Iglesia y sus santos.

 

Cada uno de nosotros decide el sentido que quiere darle a su vida; y quien tiene a Dios en el corazón, tiene el horizonte más bello para encaminar su existencia.

 

Por ello, los santos no perdían ocasión de anunciar al Señor, ya con sus palabras o con sus obras.

 

Encomendémonos a estos generosos multiplicadores del amor de Dios, para que como ellos, lo alabemos por siempre en el cielo.

 

Especialmente pidamos mediación a los santos que se veneran hoy, 9 de septiembre:

 

Ellos son: San Pedro Claver, presbítero religioso; san Gorgonio, mártir; san Jacinto de Sabina, mártir; san Ciarano, presbítero y abad; Beata Toribia, o María de la Cabeza, esposa de san Isidro labrador;

 

Beato Jorge Douglas, presbítero y mártir; beata María Eutimia Üffing, virgen; beato Pedro Bonhomme, presbítero;

 

Beato Jacobo Desiderio Laval, presbítero religioso; beato Francisco Gárate Aranguren, religioso y la Beata Alfonsa María Eppinger, virgen y fundadora.

 

En una época y región que vivió duramente las consecuencias de la reforma protestante, surgió una mujer con grandes dones místicos, que llenó con la luz de un nuevo carisma, su momento histórico.

 

Se trata de la beata Alfonsa María Eppinger.

 

Cuando la madre Alfonsa María, comenzó su misión como fundadora pronunció esta oración. Meditemos en esta sentida plegaria:

 

Oh María, mi querida Madre, ten piedad de mí y adóptame como tu hija. Mira, debo ser la madre de estas hijas, pero ¿cómo puedo hacerlo? Soy tan pobre, ten piedad de mi pobreza. Consígueme de tu Hijo, mi Divino Esposo, un corazón tan maternal como el tuyo. Consígueme comprensión, sabiduría y conocimiento. Oh, San Alfonso, Santa Teresa, vean la carga que me fue impuesta, ayúdenme, rueguen por mí.

 

Fundar una comunidad puede parecer a los ojos del mundo una empresa, un proyecto, una acción social, realizada en grupo, pero para el fundador o fundadora, es una cuestión de amor.

 

Aquel a quien Dios llama a convertirse en fundador, es un ser humano consciente de su fragilidad, que con un corazón de águila, vive sumergido en el amor de Dios, que él le manifiesta en todas las cosas y además, es consciente de que el mundo y las almas son indiferentes a este infinito amor.

 

Es tal ese arrojo, que su testimonio no deja indiferente y muchas personas terminan asociándose respondiendo al amor de Dios con las obras, en el sacrificio, en el silencio, en la oración, en la humildad, en la fraternidad, en el trabajo consciente y adornado como ofrenda para Dios.

 

Es una carga grande, no por el trabajo, sino por los corazones duros que no oyen la dulce llamada de Dios a la conversión.

 

Oremos por todos los religiosos que día a día, trabajan y oran fraternalmente sin rendirse, para que muchos se encuentren con el amor de Dios.

 

Beata Alfonsa María Eppinger,

 

Ruega por nosotros.