
175| Beato Brocardo - 2 de septiembre - Catálogo Divino - Quinta temporada (2025)
Catálogo divino - la vida de los santos 🙏🏼
Un saludo fraterno, lleno de alegría para todos los seguidores del Catálogo Divino.
En nuestras devociones, los católicos tenemos en gran estima la devoción a la Virgen María: ella que nos lleva a encontrarnos con Jesús de una manera dulce y luminosa, además, ha animado a muchos santos a amar y servir a Dios y a los hermanos, con entrega y alegría.
Encomendémonos a María Santísima y a los santos que en este 2 de septiembre, también quieren animarnos a buscar la santidad tomados de la Mano de nuestra Madre María.
Escuchemos sus nombres: San Zenón, mártir, Santa Teodota con sus hijos Evodio, Hermógenes y Calixto, mártires; San Habib, diácono y mártir; san Antonino, mártir; san Próspero, obispo; san Justo, obispo;
San Nonoso, abad; san Siagrio, obispo; san Agrícola, obispo; san Elpidio, eremita; santos Alberto y Vito, monjes; beato Brocardo, prior de los eremitas del Monte Carmelo; beata Ingrid Elofsdotter, viuda y religiosa;
beatos mártires Juan María de Lau d’Allemans, Francisco José y Pedro Ludovico de la Rochefoucauld, obispos, más 93 compañeros, religiosos y clérigos; beatos mártires Pedro Jacobo María Vitalis, presbítero, y veinte compañeros, presbíteros y entre ellos un diácono.
Entre los grandes devotos de la Virgen María, conozcamos hoy la historia de un beato carmelita que fue una figura muy importante en su orden en el siglo XII.
Él es el Beato Brocardo.
Elevemos nuestro corazón con esta plegaria a la Virgen del Monte Carmelo, quien es un manantial de bendición, para los fervorosos carmelitas:
Oh, hermosísima Flor del Monte Carmelo, Vid Fecundísima, Esplendor del Cielo, Santísima Madre del Hijo de Dios, Virgen Inmaculada, ayúdame en esta necesidad. Oh, Estrella del Mar, ayúdame y muéstrame que eres mi Madre.
Oh, Santa María, Madre de Dios, Reina del Cielo y de la Tierra, te suplico humildemente desde lo más profundo de mi corazón que me socorras en esta necesidad; nadie puede resistir tu poder.
Oh, muéstrame que eres mi Madre. Oh, María, concebida sin pecado, ruega por nosotros que recurrimos a ti.
Dulce Madre, pongo esta causa en tus manos.
Es hermoso ver cómo el Espíritu Santo suscita carismas y espiritualidad en la vida consagrada.
Hoy, el beato Brocardo nos invita a reconocer que es fundamental para la vida espiritual, conducirse en obediencia al magisterio y la doctrina de la Iglesia.
Permanecer en la comunión y seguir la guía del Espíritu Santo permite que la consagración de la vida sea para dar frutos de santidad.
Beato Brocardo,
Ruega por nosotros.