Sigamos descubriendo en compañía de los santos, un camino certero para llegar al cielo.
En nuestro Catálogo divino seguimos encontrando testimonios maravillosos de personas que lo dejaron todo para llevar al mundo la buena noticia de Jesucristo.
Muchos misioneros han vivido experiencias realmente épicas en su evangelización. Ellos nos invitan a dejarnos invadir del Espíritu Santo para que podamos anunciar a Jesucristo sin temor.
Demos paso a escuchar los nombres de aquellos santos que nos inspiran en este día, 20 de junio a ser intrépidos discípulos y misioneros de Jesucristo:
San Metodio de Olimpo, obispo y mártir; San Gobano de Irlanda, presbítero; San Juan de Matera, abad; Beata Margarita Ebner, virgen; Beato Dermicio O’Hurley, obispo y mártir;
Beata Margarita Ball, madre de familia y mártir; Beato Francisco Pacheco y ocho compañeros mártires y el Beato Tomás Whitbread y compañeros mártires.
Hoy escucharemos la impresionante historia de unos valerosos jesuitas misioneros en el Japón que dejaron sembrado el Evangelio en tierras niponas, hasta dar su vida por Cristo.
Conoceremos a los beatos Francisco Pacheco y compañeros mártires.
Pidamos a estos valientes testigos de Cristo que nos concedan perseverancia en la adversidad.
Señor, que nos reconfortas con el heróico martirio del Beato Francisco y de sus compañeros, concédenos propicio que aquellos cuyos méritos nos llenan de alegría, intercedan por nosotros para que podamos también seguir su ejemplo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Mantener la alegría en medio de la adversidad no es tarea fácil, ya que las emociones nos juegan en contra, y fácilmente perdemos el entusiasmo ante las preocupaciones de la vida.
Pero debemos tener presente lo que nos enseñó Jesús con su palabra, recordándonos que debemos cuidarnos a la hora de escuchar el Evangelio, pues las adversidades pueden ahogar rápidamente el brote de esa semilla.
Procuremos ser tierra fértil, donde demos el ciento por uno, de tal manera que vengan alabanzas o lleguen injusticias, nuestra respuesta sea de bendición.
Beatos Francisco Pacheco y compañeros Mártires,
Ruega por nosotros.