
En este episodio seguimos desenterrando la profundidad de Romanos 6, esta vez con una pregunta clave: ¿quién fue crucificado con Cristo? Muchos cristianos usamos términos como “viejo hombre”, “carne”, “naturaleza pecaminosa” o “pecado que mora en mí” como si todos significaran lo mismo, pero Pablo hace distinciones importantes que cambian radicalmente cómo entendemos nuestra identidad. Según él, algo específico fue crucificado de forma definitiva: el viejo hombre.
Comprender esto no es solo un tema teológico, es una herramienta vital para vivir una vida en libertad. Si Dios ya ejecutó una acción pasada y terminada al crucificar a nuestro viejo yo, ¿por qué seguimos luchando como si nada hubiera cambiado? Este episodio te ayudará a ubicar esa batalla diaria en el lugar correcto: no como esclavo del pecado, sino como alguien que vive desde una victoria ya realizada en Cristo.