Esta es la historia de una familia de trabajadores migratorios que se vieron forzados a quedarse en el pueblo debido a que la hija estaba enferma. Los habitantes del pueblo no les tenían confianza, por lo que, aun sin conocerle juzgaron mal al padre. Rogelio hacía donaciones anónimas en agradecimiento, y no quería que nadie lo supiera, pero Dios obra en formas misteriosas y finalmente todos lo supieron.