Lamentaciones es una colección de cinco lamentos poéticos que lloran la destrucción de Jerusalén en el 586 a.C. El libro describe el sufrimiento del pueblo, la desolación del Templo y las consecuencias de alejarse de las leyes divinas.
Reconoce que la catástrofe fue resultado de la desobediencia de Judá, pero también expresa esperanza en la compasión y restauración divinas. El famoso versículo 'Sus misericordias son nuevas cada mañana' (Lamentaciones 3:22-23) refleja la creencia de que la renovación aún es posible.
El libro sirve como una reflexión sobre el duelo, el arrepentimiento y la resiliencia de la fe en tiempos difíciles.